Eliot ya va a hacer trece meses. Es un niño muy curioso y en casa siempre lo dejo que vaya donde quiera. No hay peligro. Aunque siempre con los ojos y los oídos bien abiertos, le dejo explorar por cada rincón. Al principio de su gateo abría cajones sin cuidado y alguna vez se llevo un gustillo. Ya aprendió que los cajones hay que cerrarlos con cuidado, sabe donde está el limite. Pero para eso debe explorar.
Mi manera de hacer tal vez ponga a alguna persona las manos a la cabeza. Nunca le tengo miedo a nada. Les doy libertad para explorar y al final se hace más seguros y controlan mejor todos los espacios. En casa siempre estamos inventando el qué hacer, partiendo de la curiosidad del niño, y sus necesidades. Cada vez estoy más convencida de que es mas valioso crear sobre la marcha , menos juguetes reales, menos plástico. Aquí os dejo unas imágenes de posibles juegos para entretener a un bebé de un añito, sin necesidad de meterle en un parque o de darle juegos de plástico ruidosos.
- En un paquete de toallitas vacio meter papeles de diferentes texturas (pinocho, celofán, albal, higienico, de horno...)
- Abrir una ranura en una caja y meter tapas de lata. Les parece mágico por como suena y por como desaparece.
- Con limpia pipas de colores trabajar la psicomotricidad fina con un colador.
- Los cuentos les apasionan desde muy temprana edad. Trabajar el vocabulario y hacer sonidos para estimular el habla,
- Con pompones de colores podemos hacer muchas cosas. Solo ponle un bote, muchos pompones y el solo ya sabrá que hacer.
Y mi juego favorito, es este que ha inventado su hermana mayor para ayudarle a andar. Muero de amor
Ala! a jugar!
No hay comentarios:
Publicar un comentario