jueves, 19 de mayo de 2016

Sol...

Hace dos dias se nos murió nuestro gato Sol. La muerte es uno de los grandes tabúes de los niños, y desde mi punto de vista hay que explicarles las cosas desde la mas sincera realidad. También es de las grandes frustraciones del ser humano, cuando deberíamos asumirlo y vivirlo de la manera más natural y positiva posible, para que no se nos quede la espina clavada de por vida. Así lo veo yo y así lo quiero trasmitir a mis hijos. 

Cuando se lo dije, Gala lloró... ¡claro! era uno de sus mejores amigos y debe sentir la perdida. Le dije que llorara, pero que vería  que no pasa nada. Que le íbamos a recordar y que cuando Luna, la otra gatita que tenemos, Tuviera a los bebes que tiene en su tripa íbamos a acoger a uno. Que la vida es esa, nacemos, crecemos y morimos, y que todos vamos a pasar por ahí, por eso hay que disfrutar mucho de todo y todos lo que amamos. 

Ya mi padre y yo lo habíamos enterrado. La llevé hasta allí y esta tarde le hemos pintado unas piedras, unas de ellas con mariquitas, porque a " Sol le encantaban los bichos voladores"

Es parte del aprendizaje y de la formación como persona la que Gala esta viviendo ahora. El asumir que esto es un camino con principio y fin.  

Cogimos la primera rosa que ha salido en el jardín para él. Y respeté su silencio... es curioso, la espiritualidad de los niños, sin cultivar mucho, respetando...a su manera...